"¡Este colegio lo van a terminar!". Ha sido, en clave reivindicativa, uno de los lemas utilizados en la concentración llevada a cabo esta mañana por ochenta personas ante el centro docente unionense en una convocatoria efectuada por el AMPA en protesta por estar sin acometer la segunda fase del proyecto, entre otras carencias.

"Estamos abandonados por la consejería de Educación", ha explicado la presidenta de la asociación de madres y padres del colegio Rey Juan Carlos I, Caridad Ortega, explicando que hace cuatro años "nos prometieron acabar con la segunda fase y no ha sucedido así, con lo que están mezclados niños de Primaria con Infantil, además de aulas en los pasillos, una biblioteca que no se puede realizar y el terreno donde se efectúa la educación física es de tierra y no es el apropiado", ha indicado. También ha resaltado la ausencia aún de un aula prefabricada que no llega, "ahora dicen que vendrán en octubre".

Caridad Ortega ha indicado que mantuvieron una reunión con la consejera "en la que nos enseñó un pliego, que no está licitado y la mitad estaba hecho a bolígrafo, indican que se haría pero que de momento no hay presupuesto. Prometió en junio que estaría en los presupuestos y no está, prometió en mayo que haría una pista polideportiva que tampoco ha hecho...". Además de la pancarta anunciada, hoy lucía otra con el texto 'No sin mis amigos'. "El motivo es que si no se termina el colegio se quedaría sólo como un colegio de Infantil se tendrían que ir a otros colegios y se quedarían sin sus amigos. Además, no hay sitio en otros colegios. Por eso, los niños protestan con esta pancarta que llevan sus huellas".

Las protestas seguirán todos los lunes con vestuario negro entre sus participantes, "y estamos dispuestos a ir a Murcia para que la consejera nos oiga". La concentración también ha contado con representantes de los colegios Alfonso X y Herrerías de La Unión y del Santiago Apóstol de Portmán, además de la asociación de vecinos de la ciudad y de las concejales Elena Lozano y Leticia Egea, entre otros, como Valentín Escobar, reciente pregonero de las fiestas de Roche y que sigue siendo un ejemplo de movilización vecinal.