Una noticia, un viaje, una imagen en televisión, una conversación con un conocido… cualquier cosa es motivo de inspiración, germen de una increíble historia para Alfredo Gómez Cerdá, el reconocido escritor de narrativa infantil y juvenil, que esta misma mañana ha protagonizado un encuentro con los alumnos de primer y segundo curso de la ESO del IES Sierra Minera de La Unión, en el salón de plenos de La casa del Piñón.

El autor en un espontáneo gesto, y dejando atrás el escenario que se le había preparado para la ocasión, se ha mezclado con los jóvenes estudiantes iniciando una cálida charla que ha llevado a los alumnos a un nivel de participación extraordinaria. Alfredo Gómez nos ha regalado multitud de anécdotas sorprendiendo a los chicos por su cercanía y conexión, algo que sabe hacer muy bien, pues son ellos precisamente los destinatarios de la gran mayoría de historias con las que nos deleita publicación tras publicación. Y es que hemos tenido la suerte de compartir espacio con el autor de más de cien exitosos títulos, y premiado con numerosos galardones a nivel nacional e internacional, traducido a multitud de idiomas y con publicaciones en varios países de Europa, América o Asia.

Nos ha dado su particular visión de la finalidad de la literatura explicándonos “para qué sirve un libro”, y ha podido disfrutar de algunas respuestas de nuestros alumnos que entendían los libros como el vehículo “para viajar a mundos diferentes, alejados del nuestro” o “para nunca dejar de aprender cosas nuevas”.

Maestro en contar historias, de su boca han salido anécdotas y reseñas de una vida llena de ficción y realidad, cómo le gusta proyectar su mirada hacia dentro, en un ejercicio de introspección, intentando bucear en sí mismo, y hacia fuera, observando la vida y el mundo que le rodea, para no pasar por alto “lo que pasa en la calle”, como el propio autor ha dicho, citando al maestro Machado. Y es que nos decía que la mayoría de sus historias habían sido alimentadas por sucesos de nuestra sociedad actual, que según contaba, superaban en mucho a las historias inventadas, y de esta manera cualquier detalle podía llegar a ser susceptible de ser novelado. Sus Pasos de marioneta, Fantasmas del paraíso, o El rostro de la sombra, son buena prueba de ello.

Poco a poco, el madrileño escritor se ha metido en el bolsillo a los más de cien alumnos que se han volcado a preguntarle todo tipo de curiosidades, como “qué es lo que sintió al ver publicada su primera novela”, “por qué se decidió por este oficio”, “qué hubiera sido de él sin los libros” o “cuál de sus libros era su favorito”. Además de pedirle, cómo no, que nos recomendara algún libro para su lectura en el aula.

Mil gracias Alfredo por ese “puente que has tendido entre tu corazón y los nuestros”,   porque la cercanía de tus palabras ha sido capaz de despertar en nuestros alumnos la curiosidad por tus historias, el querer conocer más de ti y de tu proceso de creación, la necesidad de entrar en contacto con tus libros y comenzar ya su lectura…y ¿por qué no?, tal vez en algunos, el gusanillo de iniciarse en el maravilloso universo de la escritura.