La antesala del Festival del Cante de las Minas resultó un emotivo y variado Día de La Unión, al que puso broche la música, el baile y el trovo.

Día de La Unión de 2015, una jornada que, además de anunciar que al día siguiente comienza el Festival del Cante de las Minas, sirve también para mostrar la riqueza artística que se aloja en la localidad, una vez en forma de agrupación musical y otras de coral o rondalla, además de los nuevos valores que brotan para el baile o como el trovo sigue, paso a paso, reivindicando que La Unión es ‘minera, flamenca… y trovera’.

Con Miguel Meroño como maestro de ceremonias, el escenario fue el Antiguo Mercado Público, por donde pasaron unos seiscientos vecinos, pero donde quizás faltó más presencia popular, teniendo en cuenta que el acceso era gratuito y que el espectáculo merecía la pena. Eso sí, los que acudieron supieron reconocer con sus ovaciones lo que contemplaron.

El preludio lo puso un alcalde debutante, Pedro López, quien resaltó el espíritu luchador de los unionenses en todas las épocas, y que no va ser menos en la actual.