El juzgado de Instrucción número 3 de Cartagena impone 480 euros de multa, 640 euros de responsabilidad civil y las costas judiciales a la persona que, hace ocho días, entró en la sede municipal exigiendo trabajo al alcalde y que acabó agrediendo e insultando a los policías locales que intervinieron.

El jueves de la semana pasada se produjo un incidente en la Casa del Piñón por el que un vecino acabó encerrado en el cuartel de la Guardia Civil, siendo puesto a la mañana siguiente a disposición del juzgado de guardia, donde acudieron a declarar el alcalde, la jefa de su gabinete y dos policías municipales.

Este asunto ha propiciado que se active en diversos sentidos la rumorología estos días en la ciudad de La Unión, por lo que este periódico ha decidido esperar a que salga la sentencia para publicar la noticia, pues en ese fallo judicial se alcanza tras escuchar las declaraciones de todas las partes y testigos.

La sentencia de la jueza María del Mar Gómez, a la que hemos tenido acceso, recoge los siguientes hechos probados:

Queda probado, y así se declara expresamente, que sobre las 11.20 horas del día 3-3-2016 el acusado se personó en las dependencias del Excmo. Ayuntamiento de la Unión, sito en la Casa del  Piñón. Se dirigió a la jefa del Gabinete de la Alcaldía y le dijo: “tiene que verme el alcalde porque mi situación es muy mala y tiene que darme trabajo”. Al decirle ésta que no podía atenderle en esos momento, el acusado subió su tono de voz y de forma agresiva le manifestó: “tiene que verme”.

Al escuchar la conversación, el alcalde de la localidad salió de su despacho y le dijo que no eran las formas adecuadas y no podía atenderle en ese momento. El acusado continuó con su actitud desafiante y se dirigió a él con expresiones tales como “eres un racista, me cago en vuestros muertos”.

Al no deponer su actitud y continuar insultando a todos los que estaban presentes, tuvieron que intervenir dos agentes de Policía Local, que se encontraban perfectamente identificados y uniformados. Los agentes xxx2 y xxx8 le pidieron que se tranquilizara y abandonase las instalaciones, reaccionando el acusado de forma violenta lanzando un puñetazo al agente xxx2 y agarrando del cuello al agente xxx8, al tiempo que les decía: “te voy a matar, me cago en tus putos muertos, hijos de puta”.

Como consecuencia de estos hechos, el agente xxx2 sufrió lesiones consistentes en contusión en labio, que requirieron un única asistencia facultativa, siendo necesarias para su curación 8 días, ninguno impeditivo para sus ocupaciones habituales.

Como consecuencia de estos hechos el agente xxx8 sufrió lesiones consistentes en erosión en región cervical, que requirieron un única asistencia facultativa, siendo necesarias para su curación 8 días, ninguno impeditivo para sus ocupaciones habituales.

Dos renuncias y una condena
Una vez controlado el acusado, fue trasladado al cuartel de la Guardia Civil, para al día siguiente ponerlo a disposición judicial.

En el juzgado de guardia el alcalde y la jefa de su gabinete expresaron su renuncia al ejercicio de acciones civiles y penales, con lo que los cargos se redujeron, alcanzando un acuerdo la Fiscalía y la abogada de oficio, Beatriz Conesa, para emitir una sentencia de conformidad cuyos parámetros son seis meses de multa con una cuota diaria de 3 euros por el delito de desobediencia a la autoridad y dos meses de multa por sendos delitos leves de lesiones con una cuota diaria de tres meses, además de indemnizar con 320 euros a cada agente.

En total, 1.120 euros más las costas judiciales. El acusado aceptó dicha condena y las partes confirmaron que no recurrirán el fallo judicial, con lo que la sentencia es firme.