El fuerte viento, con rachas en ocasiones superiores a 90 km/h, no ha causado grandes destrozos en el municipio.

Ramas partidas, desplazamientos de contenedores de basura, algunos daños en el mobiliario urbano, caída de casquetes y antenas de televisión arrancadas son algunas secuelas que ha dejado el fuerte vendaval en el municipio unionense, informa el edil de Seguridad Ciudadana, Fernando Alcaraz Gutiérrez, quien destaca que la principal preocupación estuvo de madrugada por la oscilación que presentaba una antena de telefonía móvil, por lo que se llevó a cabo una vigilancia especial. También se reforzó el personal que trabajó en el servicio de recogida de basuras con el propósito de controlar el movimiento de los contenedores y que no causasen daños a los vehículos. El concejal también informa que fueron atendidas todos los avisos recibidos de los vecinos, pues la gran fuerza del viento sí provocó el temor y la constante alerta de muchos unionenses.