Gran victoria del sénior femenino del Sierramar que firmó un auténtico partidazo desde el principio y que en ningún momento dio opción a las de Blanca.

Las del valle de Ricote pelearon en el fortín de casa con todas sus armas pero no consiguieron llegar al ritmo de las que visitaban.

Las unionenses afrontaban su última visita a Blanca y su último partido en esta temporada arrancando el encuentro con mucha energía, obligando a pedir un tiempo muerto a las locales en el minuto tres, ya que comenzaban con una defensa muy fuerte abajo, provocando dificultad en el ataque de las locales. No sirvió de mucho porque en el minuto cinco agotaba sus tiempos muertos el equipo local para intentar cortar el parcial de 2-9.

Las visitantes vieron el aro desde el principio mostrando una clara superioridad, que además de estar muy acertado en ataque al aro, su defensa imposibilitaba cualquier buen resultado del ataque de las chicas de la vega alta del Segura. Se llegaría al final del primer cuarto con un 08-20, que dejaba claras las cosas desde los primeros minutos.

El segundo cuarto, con las unionenses siguiendo acertadas de cara al aro y jugando a su ritmo, buscando opciones abiertas, resultado de un juego más ordenado y de una ligera superioridad en el rebote ofensivo, poco a poco las diferencias fueron aumentando. Cada vez que las locales intentaban acercarse en el marcador, las visitantes pisaban un poco el acelerador para aumentar la diferencia en el luminoso. Al descanso, se llegó con un parcial de 13-18, siendo el total de puntos en el marcador 21-38.

Si en la primera parte el color era verde, en la segunda las visitantes continuaron su progreso en la misma línea anotadora. Las 5 faltas de equipo quedando más de la mitad del tiempo, dieron más oportunidad añadida a las de La Unión. Las visitantes atacaron con insistencia la zona plantada por las de Blanca, siendo acertadas en el aro. El parcial de este acto quedó en 05-10.

Ya en los últimos diez minutos, vino la confianza por parte de las unionenses, que bajaron el ritmo. Eesgaste en defensa de todo el equipo se hizo patente en el último periodo. Un pequeño relajamiento dio algunas esperanzas a las del banquillo local con un parcial de 7-0 del minuto tres al seis. Pero esto no alejó de su meta a un Sierramar que firmó uno de los mejores partidos de la temporada basado en una estricta defensa, pero en un inspirado ataque que dio como resultado otra victoria.

Las unionenses, demostraron una semana más, como en las veintitrés anteriores, que no dejaron de luchar cada momento. Han terminado la liga en la quinta posición empatados con Marme y Molina y sobre todo con la sensación de haber crecido como equipo que era uno de los principales objetivos.