Esperaron a que se retirasen los agentes para liarse a palos
La violencia, tras un año ausente, regresó a Portmán durante la
celebración de sus fiestas patronales. A las cinco y media de la
madrugada se marcharon del lugar quince agentes de Guardia Civil, Linces
y Policía Local, surgiendo entonces dos peleas multitudinarias. Valga
el dato de que en unos minutos fueron 25 llamadas las registradas al
servicio de Emergencias 112.
Las
peleas entre grupos o bandas de jóvenes mancharon las fiestas
portmaneras en 2017. Un año más tarde no hubo que lamentar este tipo de
capítulos, pero este año vuelven a escena, otra vez en la 'Noche local',
la que dedica el programa festero a los jóvenes.
Las medidas
preventivas abarcaban a quince agentes de los grupos especiales 'Lince'
de la Benemérita, Guardia Civil y Policía Local, pero a las 5.30 horas
se marcharon por concluir turno. Poco después se desataron las peleas,
siendo dos las batallas campales que los testigos señalan que tuvieron
lugar.
Fueron avisadas las fuerzas de seguridad, aunque en ese
caso ya los efectivos eran menos, con dos agentes municipales de La
Unión y cinco de los cuarteles de la Guardia Civil de Cartagena y de
Fuente Álamo. También se desplazaron al lugar ambulancias.
El
balance fueron muchas policontusiones como consecuencias de puñetazos,
patadas y lanzamientos de objetos, entre otras actitudes violentas. Dos
personas fueron atendidas por golpes con heridas sangrantes sufridas en
la cabeza. Uno se desplazó a Urgencias del hospital de Santa Lucía en
ambulancia y otro decidió hacerlo por sus propios medios.
Según
comentarios diversos de vecinos y testigos, los violentos jóvenes
esperaron que se marcharan los cuerpos de seguridad para pelearse.
También nos apuntan que había un grupo venido de fuera de Portmán y que
resultó herida una persona ajena a estos enfrentamientos.